Todas y cada una de las bodas en las que participamos son especiales, muy especiales. Pero en este caso, las dos preciosidades que acompañan a sus padres en este día tan señalado hacen que todo sea más emotivo. Tanto que en algún momento hasta les robaron un poquito el protagonismo a los novios
Por que a veces las bodas no son sólo cosa de dos, sino una cosa de familia.
Una familia preciosa y unas fotos increibles!
Enhorabuena por vuestro trabajo y felicidades a Mel y Alex por su preciosa boda.